Nepal, jalea entre dos rocas.

Llegamos a Katmandú después de una larga espera por una huelga de Air India. Gran cantidad de policías en el aeropuerto y largas colas de autos. Recién se iba el primer ministro chino. Tremendas medidas de seguridad, aparentemente por temor a manifestaciones de los tibetanos (se detuvieron unos cuantos refugiados). Fue una visita relámpago y en secreto. China ofreció 135 millones de dólares para la mejora de la infraestructura nepalesa. Se dice que pidió que no se reciban refugiados tibetanos.

Nepal es un país pequeño entre dos gigantes, India y China. A veces se lo ha llamado "jalea entre dos rocas". Está al pié de los Himalayas.

Era el único país con una monarquía hinduista pero en 2008  se instauró la república. El gobierno actual es de orientación maoísta. La mayor parte del pueblo es hinduista a pesar de la fuerte tradición budista de Nepal. Sidharta Gautama (Buda) nació en Lumbini, Nepal, en el clan  de los Sakya. Por eso se lo llama también Sakyamuni (el sabio de los Sakya).

La bandera es lindísima. Es la única  del mundo que no es rectangular. Me encantó y me traje una chiquitita.

La moneda es la rupia nepalesa. Como usan números diferentes, según de qué lado mires el billete no te das cuenta de cuánto es. Los diferentes alfabetos me resultan más familiares pero encontré rarísimo ver los números distintos.

Si los tenés doblados sobre el lado de la izquierda, estás en dificultades para distinguir la denominación. ¿No son hermosos los billetes? Ni digamos si tenés problemas con un auto en la calle y tenés que hacer la denuncia! Los datos de la patente son:

Nos alojamos en el Kathmandu Guest House, yeah, yeah, yeah!

Yeah, yeah, yeah porque aquí, entre otros, se alojaron Los Beatles en 1968 como cuenta el cartel que lustran todos los días! Te avisan que el edificio es de madera para que no fumes ni prendas incienso en las habitaciones y de paso te recuerdan lo de los Beatles.

A la distancia, casi les perdono el frío tremendo que pasé hasta que lograron arreglar la calefacción. En la entrada, su propio Camino de la Fama: además de los Beatles, Jeremy Irons, Ricky Martin, etc. Me mata su Camino de la Fama!!

 Tiene una cafetería al aire libre (que no frecuenté! brr brr! ... debe ser divina en primavera). Como puede verse, hay gente mucho más osada (o menos friolenta) que yo (que me llevé de recuerdo del hotel un lindo resfrío.)

 En el desayuno, observé con alarma que el café era instantáneo! The horror, the horror! Pero descubrí él nombre ILLY en el mostrador del costado y logré que uno de los muchachos entendiera cómo me gusta el café (bueno, todos tenemos nuestras mañas!!! que le va a hacer...) 

Al frente,  mi cafetero favorito, sobre la izquierda el ¿protector? (ver foto más abajo)

Van algunas imágenes más del jardín del fondo por donde se iba a nuestro cuarto y de un ¿protector? que estaba por todos lados y me resultó muy simpático.

El hotel está ubicado en Thamel, un barrio con callecitas angostas por las que es lindo perderse. Está lleno de negocios de todo tipo. Además de lo típico de Nepal venden ropa de montaña, en especial de la marca The North Face (trucha, claro, es The North Fake!)  Todos compramos abrigo allí. También hay tiendas de música. Cuando fuimos sonaba por todos lados el Om Mani Padme Om del cd Tibetan Incantations, que por supuesto me traje. El tema es hermoso y se puede escuchar online aquí: http://diydharma.org/om-mani-padme-hum-tibetan-incantations. 

Era muy lindo estar ubicado allí porque al volver de las visitas podíamos salir a recorrer y comprar sin preocuparnos por el regreso. Por lo que sí podíamos preocuparnos era por los cortes de luz! Nepal tiene serios problemas de infraestructura. Tienen cortes de hasta diez y doce horas. Así que estabas en uno de esos puestitos y de pronto estaban con las luces de emergencia, no veías nada. En un hotel en el que almorzamos, le indicaban a los huéspedes junto con el horario del restaurant y otros datos, el cronograma de cortes de luz del día!!

También había restaurantes y bares con música y comida internacional como La Dolce Vita donde comí un risotto riquísimo (increíble que pidiera ARROZ! pero me encanta el risotto y estaba re bien preparado). Acompañado por una copa de vino, estuvo genial.

Estaba justo enfrente del hotel. Igual que el New Orleans que era más una suerte de pub donde paraban los más jóvenes del grupo con sus ipads. Fuimos una noche con Marlys. Lindo lugar, bueno para practicar la ciencia de la paz, es decir, la paciencia porque el servicio tarda años!!

Lindísimo lugar Kathmandú, con mucha onda! Lo disfruté mucho.